Esta Vez, ¡No Perderé!’

Capítulo 304 

Las discusiones de los fanáticos y detractores saltaban por los aires esa mañana, convirtiéndose en meros bufones. 

Mauricio estaba agobiado por los parientes de Lucy, y cuando finalmente pudo escapar, se encontró con las noticias sobre Beatriz y Javier que le molestaron profundamente, asi que llamó a unos amigos para ahogar sus penas en alcohol. 

Desde que Beatriz debutó, Tomás habla sido un admirador secreto, pensando que ella había cambiado para mejor, mostrándose ahora confiada y nada parecida a la chica arrogante y retorcida que solía seguir a Mauricio. 

Sin embargo, jamás dejaria que‘ Mauricio supiera de su admiración por Beatriz. 

Tomás temía que si hablaba bien de Beatriz, Mauricio pudiera intentar reconquistarla y, en consecuencia, terminar siendo su cuñado. 

Preferiría ser él mismo el cuñado antes que Mauricio. 

Después de todo, nadie conocía mejor los defectos de sus amigos que ellos mismos. 

Si Mauricio terminaba siendo su cuñado, Tomas pasaría sus dias ideando cómo deshacerse de él. 

Esa mañana, al ver la noticia de “Beatriz engaña“, Tomás pensó que Beatriz habla vuelto con Mauricio, el “pasto mustio“, lo que le llevó a revisar las fotos inmediatamente. 

Para su sorpresa, el hombre con Beatriz parecia bastante atractivo, incluso a través de la difusa imagen se podia apreciar su buena apariencia y estatura. 

Esto le llenó de alegría a Tomás. 

Cuando supo por Mauricio que el esposo de Beatriz era un hombre mayor y feo, sintió pena por la bella flor que había sido malgastada. 

Ahora que Beatriz tenia un novio guapo, Tomás se sintió un poco mejor. 

Mientras bebia con Mauricio, Tomás continuó révisando su teléfono. 

¡Oh! Beatriz habia publicado algo en las redes sociales. 

Rápidamente comentó: “Hermana, te amo. Quédate con el guapo, olvidate de tu feo marido“. 

Menos de un minuto después, Beatriz respondió. 

Después de leer la respuesta, Tomás miró a Mauricio con una expresión extraña: “Mauri, ¿alguna vez has visto al marido de Beatriz en persona? 

Por un momento, la expresión de Mauricio se torció, cruzada por un destello de resentimiento: “Sí, es un hombre corriente y vulgar.” 

Tomás mostró la foto de Beatriz y Javier besándose: “¿Y este quién es?” 

Mauricio quedó estupefacto, en completo silencio. 

Después de un rato, Mauricio soltó una risa fria: “Ah, es él, Javier, ese loco. ¿Te parece bien? Es un pretencioso que se cree mucho solo porque tiene algo de dinero.” 

Tomás: 

Antes pensaba que solo las mujeres eran celosas. 

Ahora vela que un amigo celoso podia ser incluso peor. 

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Capitulo 304 

Una mujer celosa de otra podría simplemente criticarla, pero nunca llegaría al extremo de insultar a una belleza. Sin embargo, entre amigos, uno tiene que proteger el frágil ego del otro, así que Tomás asintió vehementemente: “Claro, claro, tienes razón. No es tan guapo como tú.” 

Demasiado alto, demasiado bien formado, rasgos demasiado marcados, y qué más da si tiene una presencia distinguida. No se puede comer el orgullo. En definitiva, no se compara contigo, Mauricio. 

La tensión en el rostro de Mauricio se suavizó un poco. Content is property © NôvelDrama.Org.